Enfermedades inflamatorias tipo 2

¿Qué es la inflamación tipo 2?

Nuestro sistema inmune genera una respuesta ante ciertos tipos de infecciones llamada inmunidad tipo 2, consistente en la liberación de células inmunitarias específicas de tipo 2, que luchan contra esos parásitos, alérgenos o toxinas mediante la inflamación.

Sin embargo, en ocasiones esa inmunidad se desregula y las células inmunitarias de tipo 2 actúan ante algunos alérgenos incluso cuando no existe infección, con una respuesta inmunitaria exagerada llamada inflamación tipo 2 (T2), que causa daños al organismo y puede originar varias enfermedades entre ellas el asma. Entre un 50% y un 70% de los pacientes con asma tienen inflamación tipo 2.

Su nombre deriva de la implicación de linfocitos Th2 y células T linfoides innatas (ILC2). Las células Th2 se suelen activar en las personas alérgicas al exponerse a un alérgeno y liberan moléculas que desencadenan la inflamación típica del asma alérgica. Por su parte, las células ILC2 se activan cuando agentes como virus, sustancia irritantes o contaminación dañan las células de la superficie del bronquio, que liberan alarminas, unas moléculas que, a su vez, estimulan a otras células causando una inflamación con predominio de eosinófilos, un tipo de células autoinmunes.  

Enfermedades causadas por la inflamación tipo 2

La inflamación tipo 2 está en el origen de distintas enfermedades alérgicas, atópicas y eosinofílicas como asma, rinosinusitis crónica con o sin pólipos nasales (RSCcPN o RSCsNP), rinitis, dermatitis atópica o esofagitis eosinofílica. Se diferencian de una alergia común en que presentan una mayor complejidad y gravedad.

Estas patologías pueden presentarse aisladas o coexistir varias de ellas. Se estima que hasta una tercera parte de los pacientes con asma grave desarrollan dermatitis atópica y hasta un 50% de quienes padecen dermatitis atópica o rinosinusitis crónica con poliposis nasal tienen también asma. A su vez, cerca de la mitad de quienes sufren asma grave tienen RSCcPN. La asociación de asma, poliposis nasal e intolerancia a la aspirina y a otros antinflamatorios no esteroideos (AINES) se conoce como enfermedad respiratoria exacerbada por AINES (EREA) y da lugar mayor gravedad y peor pronóstico. Entre un 10% y un 20% de quienes padecen rinosinusitis crónica con pólipos nasales presentan EREA.

A pesar esa frecuente coexistencia y de su fisiopatología común, muchas veces estas enfermedades se tratan de forma independiente, sin identificar la inflamación tipo 2 como nexo común, lo que resulta, por ejemplo, en un mal control del asma.

Según un estudio publicado en 2023 en la revista de investigación ‘Frontiers in Allergy’ sobre Calidad de Vida en pacientes con IT2, la coexistencia de enfermedades es un factor clave en cuanto a impacto sobre la calidad de vida de los pacientes, que disminuye significativamente cuando se dan dos o más patologías IT2, independientemente de su gravedad.

La inflamación de tipo 2 es crónica y las enfermedades que origina se diagnostican principalmente en la niñez, pero pueden desarrollarse a cualquier edad.

Además de su fisiopatología, comparten otros aspectos, como la influencia de factores genéticos, así como de factores ambientales, o el impacto que causan en los pacientes y sus cuidadores por las limitaciones para la realización de actividades, la afectación a la calidad del sueño, o problemas emocionales y de aislamiento.

Las principales patologías respiratorias causadas por la inflamación tipo 2 son:

Asma

El asma es una de las enfermedades respiratorias de mayor prevalencia, que afecta a los bronquios y se caracteriza por la inflamación y estrechamiento de las vías respiratorias y la disminución del flujo de aire en los pulmones.

El asma es principalmente una enfermedad inflamatoria de tipo 2. El asma T2 incluye el asma alérgica y el asma eosinofílica.  Si se padece asma y alergia, el asma es de tipo T2, al igual que si se tiene asma sin alergia, pero con elevación de eosinófilos. La inflamación de tipo 2 en asma está asociada a una carga elevada de la enfermedad.

El asma alérgica se desencadena por hipersensibilidad a alérgenos ambientales. Es la más común y la que suele afectar desde la edad pediátrica.

Los pacientes que padecen asma con inflamación tipo 2 son más propensos a tener su enfermedad mal controlada, con síntomas que afectan más a su calidad de vida y con crisis más frecuentes.

Rinosinusitis crónica

La poliposis nasal, poliposis nasosinusal o rinosinusitis crónica con pólipos nasales (RSCcPN), es una enfermedad inflamatoria crónica que afecta a las vías respiratorias superiores. Se caracteriza por una inflamación persistente de las fosas nasales y los senos paranasales, en los que se forman crecimientos anormales de tejido en forma de lágrimas, llamados pólipos, que son benignos y presentan abundantes células inflamatorias, principalmente eosinófilos.

Entre sus síntomas se incluyen la incapacidad para respirar por la nariz, obstrucción y congestión nasal, rinorrea, presión facial, dolor de cabeza y, en muchos casos, pérdida parcial o total del olfato (hiposmia o anosmia) y del gusto.

El 80 % de las personas con RSCcPN tiene inflamación tipo 2.

La Rinosinusitis crónica sin pólipos nasales (RSCsPN) está originada por un mecanismo inflamatorio distinto, pero también puede coincidir con una inflamación tipo 2 o ser eosinofílica.

La RSCcPN es común en pacientes con asma, en los que la presencia de pólipos nasales se ha asociado con la gravedad del asma. Hasta un 70% de los pacientes con RSCcPN pueden desarrollar asma, dependiendo del grado de inflamación tipo 2.

Rinitis

La rinitis alérgica es una de las manifestaciones de la alergia respiratoria. Se caracteriza por la inflamación de la mucosa nasal provocada por un alérgeno como polen, polvo, caspa de animales o moho.

Sus síntomas principales son estornudos; picazón en la nariz, la boca, la garganta o los ojos; congestión y secreción nasal. Son síntomas similares a los de un resfriado común, por lo que muchas veces se confunden y el paciente no distingue cuál es la causa de su malestar. Sin embargo, hay diferencias entre ambas afecciones: la rinitis alérgica no se desencadena por un virus, sino por la exposición a un alérgeno, comienza inmediatamente después de esta y dura mientras se mantenga dicha exposición. Además, a diferencia del resfriado, no cursa con fiebre ni febrícula y la secreción nasal es acuosa y escasa.

EREA

La enfermedad respiratoria exacerbada por AINEs (EREA), también llamada Triada de Samter, es una condición médica crónica que combina asma, pólipos nasales recurrentes y sensibilidad a la aspirina y otros antiinflamatorios no esteroideos, como ibuprofeno, naproxeno o diclofenaco.

Las personas con EREA sufren una reacción adversa entre media hora y dos horas después de tomar aspirina o un AINE, caracterizada por problemas respiratorios y que puede ser grave.

Aunque no s considera una enfermedad autoinmune, se cree que la desregulación crónica del sistema inmune es subyacente a la EREA, que se asocia con altos niveles de eosinófilos en sangre y en los pólipos nasales.

Epoc

Aunque en la mayoría de los pacientes con epoc la inflamación más común es la de tipo 1 o neutrofílica, entre un 20% y un 40% de ellos tienen inflamación tipo 2 con niveles elevados de eosinófilos.

 

Diagnóstico de las enfermedades inflamatorias tipo 2

Para determinar la existencia de inflamación tipo 2, el médico puede apoyarse en distintas pruebas como:

  • Examen de sangre o esputo (moco producido por los pulmones) para comprobar los niveles de eosinófilos.
  • Examen de concentración fraccionada de óxido nítrico exhalado (FeNO), que permite comprobar la inflamación en los pulmones. La prueba consiste en soplar lenta y continuamente en un dispositivo portátil, que mide el óxido nítrico en el aire exhalado. Los valores de FeNO pueden ser altos en asma alérgica o eosinofílica.  
  • Para obtener más información sobre la inflamación, puede realizarse un análisis de sangre para medir los niveles de inmunoglobulina E (IgE).

Además, puede estudiar el historial familiar para comprobar si otros miembros padecen alguna enfermedad inflamatoria tipo 2, lo que puede indicar que el paciente esté también afectado por la inflamación.

Previamente, se realizarán las pruebas correspondientes para el diagnóstico de cada una de las enfermedades que puede causar la inflamación tipo 2, en función de los síntomas que hayan llevado al paciente a consulta y se comprobará si el paciente sufre más de una de estas enfermedades, ya que es frecuente que la T2 cause más de una patología en una misma persona.

En el caso del asma, las principales pruebas diagnósticas son la espirometría, pruebas de provocación, cutáneas de alergia, radiografía de tórax y pruebas de esfuerzo. Para diagnosticar la rinosinusitis crónica con poliposis nasal, las pruebas habituales son la rinoscopia, la endoscopia nasal, TAC de senos paranasales y resonancia magnética de cráneo y senos paranasales.

Tratamiento de las enfermedades inflamatorias tipo 2

El tratamiento básico para las enfermedades respiratorias por inflamación tipo 2 consiste fundamentalmente en corticoides inhalados -en el caso del asma- e intranasales -para la rinosinusitis crónica-, así como antiinflamatorios y otros fármacos que ayudan al alivio de los síntomas y el control de la patología.

Además, existen actualmente en España fármacos biológicos aprobados y financiados por el sistema público de salud para el tratamiento del asma T2 y de la rinosinusitis crónica con poliposis nasal, ya que actúan tanto a nivel bronquial como nasal.

Son los medicamentos omalizumab, mepolizumab, benralizumab, reslizumab y dupilumab, que actúan uniéndose a puntos clave de las células para bloquear la reacción inmunitaria T2, y el tezepelumab, cuya acción se dirige a dejar sin efecto la alarmina TSLP.

Contacta con la asociación más cercana a ti​

Coordinadora Nacional de Pacientes con Asma.

Cordinadora Nacional de Pacientes con Epoc.

AIRE (Cataluña).

AIRE LIBRE. Asociación de Enfermos Asmáticos y Alérgicos “Aire Libre” Granada.

ALERMA / AMALEPOC. Asociación de Alérgicos y Enfermos Respiratorios de Málaga.

ASBIEPOC, Asociación de Apoyo a Personas Enfermas de Epoc de Euskadi

ASMAASTURIAS. Asociación de Pacientes con Patología Respiratoria del Principado de Asturias.

ASMABI BIKZAIA. Asociación de Apoyo a Personas afectadas por el Asma de Bizkaia.

ASMAMADRID. Asociación de Asmáticos de Madrid.

A TOT PULMÓ, Asociación de Afectados Crónicos de las Vías Respiratorias (Barcelona)

EPOC ESPAÑA, Asociación Española de Pacientes y Cuidadores de Epoc

SEVILLA RESPIRA. Asociación de asmáticos, alérgicos y enfermos respiratorios de Sevilla.

 

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