Separ y Fenaer muestran su descontento ante una medida que parece desconocer cómo funcionan este tipo de actividades y no ha contado con la opinión de las Sociedades científicas y las asociaciones de pacientes. Las actividades de las sociedades científicas y las asociaciones se rigen por estrictos códigos éticos y de buenas prácticas nacionales y europeos consensuados por todas las partes implicadas incluida la industria.
