En plena campaña de vacunación contra la gripe, hay que tener claros algunos datos si se duda de la necesidad de vacunarse. Se trata de una enfermedad cambiante, que cada año varía en intensidad y virulencia, pero potencialmente grave, especialmente para los mayores y las personas en grupos de riesgo, caso de los pacientes respiratorios crónicos.

Aprovechando esta campaña de vacunación, para los pacientes con patologías respiratorias es también conveniente confirmar si se está vacunado contra la neumonía, y en caso contrario, solicitar la vacuna a los profesionales sanitarios. Ambas vacunas pueden ser administradas al mismo tiempo.

Tanto gripe como neumonía son dos infecciones que pueden tener un alto impacto en los pacientes con enfermedades respiratorias, tienen una tasa de mortalidad relevante, y son prevenibles mediante las vacunas. La neumonía neumocócica es un importante problema de salud, especialmente entre personas de edad avanzada y/o con condiciones de riesgo, y una de las principales causas infecciosas de mortalidad, especialmente en niños menores de 5 años, personas mayores de 65 años y  personas con enfermedades crónicas.

La gripe, una enfermedad cambiante

La principal dificultad para contener cada año la aparición de brotes de gripe es la naturaleza cambiante del propio virus. Cada temporada, las cepas son varias y diferentes a las anteriores, por lo que las vacunas tienen que ajustarse anualmente a lo que los expertos prevean. La mayor o menor coincidencia de las cepas circulantes con lo previsto hará que la vacunación sea más o menos efectiva. Además, la difusión del virus depende de las condiciones climatológicas de cada invierno, como la temperatura y la humedad.

La neumonía, una patología de gran impacto

Según datos del Servicio Madrileño de Salud, hasta el 1% de los españoles podrían sufrir neumonía a lo largo del año. En 2019, el último año normal dentro de la serie (la pandemia lo trastocó todo), se produjeron 9.384 fallecimientos por esta causa, más del 2% de todos los decesos registrados en el país, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística. Nada menos que 155.000 españoles fueron hospitalizados ese año por neumonía.

Gripe: los mayores están más concienciados

Cada vez más personas mayores son conscientes de la importancia de vacunarse contra la gripe. Según datos del Ministerio de Sanidad, se observa un aumento en las coberturas en las personas de 65 y más años, sobre todo en las mayores de 75, siendo este el grupo más sensibilizado. Sin embargo, las coberturas en los demás grupos descendieron en 2021 con respecto a 2022, ligeramente en personas entre 65-74 años y en personal sanitario y de manera más acusada en personas entre 60-64 años y en embarazadas.

Neumonía: muy bajos índices de vacunación en adultos.

A pesar del riesgo, la tasa de vacunación contra la neumonía neumocócica de los mayores de 65 años (22%) es todavía muy inferior a la de los niños, que es casi total (94,8%).

El pico de la gripe

Según afirma el Sistema de Vigilancia de la Gripe en España, encuadrado en el Instituto de Investigación Sanitaria Carlos III, el pico de contagios de esta enfermedad fluctúa entre la semana 47 (a finales de noviembre) y la semana 9 (primera de marzo). Es más frecuente que se dé entre la semana 2 (segunda semana de enero) y la semana 6 (segunda de febrero). La más tempranera desde que hay registros fue la campaña 2003/2004 y la más tardía la 2015/2016.

2020/2021, la campaña de gripe más extraña

La campaña de gripe 2020/2021 fue, como es fácil suponer, la más anómala de las registradas. La generalización de medidas de distancia social y uso de mascarillas impuestas por el Gobierno en el contexto de la lucha contra la pandemia del covid-19 limitaron enormemente la difusión del virus.

Fuentes

Sistema de Vigilancia de la Gripe en España

Ministerio de Sanidad: la gripe

Observatorio del Servicio Madrileño de Salud

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