Ejercicio Físico

El ejercicio físico regular, adaptado al estado de salud de cada persona y orientado por profesionales ha demostrado ser altamente beneficioso como parte del tratamiento terapéutico de las enfermedades respiratorias, incluidas el asma y la Epoc.

Si hasta ahora se ha llevado una vida más sedentaria, es importante saber que la adaptación debe ser progresiva hasta llegar al punto ideal de cumplir un calendario diario de ejercicio.

El mejor modo de comenzar es elegir una actividad que nos guste y con la que nos sintamos cómodos. Las posibilidades son muy amplias, desde salir a caminar a la bicicleta estática, nadar o incorporarse a grupos de baile o fitness en gimnasios.

Hacerlo de modo progresivo, fijarse metas alcanzables y de acuerdo con nuestra capacidad es fundamental para mantener la motivación y lograr los objetivos.

Si crees que ejercitarte tu solo es un objetivo más difícil de conseguir, anímate y busca, o crea tú mismo, grupos locales que te faciliten el ejercicio diario. Caminar con otras personas con las mismas limitaciones ayuda a motivarse.

Para obtener los beneficios del ejercicio físico es recomendable seguir un programa por un médico o fisioterapeuta, que permita al paciente vencer el temor o resistencia inicial a la actividad física y adaptarse progresivamente a ella incorporándolos a su rutina. Estos programas suelen combinar los ejercicios aeróbicos con los destinados al fortalecimiento muscular.

Como consejos generales, el profesional recomendará:

  • Realizar un precalentamiento y estiramientos musculares al finalizar.
  • Incluir estiramientos para mejorar la flexibilidad.
  • Aumentar gradualmente la actividad a su propio ritmo.
  • Prestar atención a la respiración y a la posible aparición de síntomas asociados a la enfermedad.

EJERCICIO FÍSICO EN EL EXTERIOR

Si el ejercicio se realiza en el exterior es importante tener en cuenta los factores asociados a la calidad del aire que respiramos:

  • Elegir las horas de menor contaminación.
  • Trazar rutas para evitar las grandes concentraciones de tráfico en función de los horarios, alejándose de las vías, carreteras y autopistas con tráfico elevado.
  • Alejarse de zonas industriales.
  • Utilizar de modo regular las aplicaciones que en muchas ciudades ya nos indican los índices de polución por zonas y horarios.

BENEFICIOS DEL EJERCICIO FÍSICO PARA PACIENTES RESPIRATORIOS

  • Mejora los síntomas.
  • Disminuye la disnea.
  • Incrementa la tolerancia al propio ejercicio.
  • Reduce la sensación de cansancio.
  • Mejora la musculatura y las articulaciones.
  • Mejora el sistema cardiovascular y la presión arterial.
  • Proporciona bienestar psicológico.

Recursos de interés sobre el ejercicio físico