J.S.P., paciente gallego con EPOC grave, estuvo 17 meses sin control médico ni pruebas funcionales hasta que recuperó sus citas pendientes. F.S.Q., paciente respiratoria de Cataluña, lleva desde 2019 sin pruebas de función pulmonar y no se le han fijado hasta noviembre de 2021, “si no vuelven a cancelar la cita por tercera vez”. Según los datos recabados por Fenaer, al 70% de los pacientes respiratorios se les anularon las citas médicas a causa de la pandemia y el 43,4% siguen a la espera, lo que implicaría más de un año sin pruebas ni consultas  imprescindibles para el manejo y control de patologías crónicas que, en el caso de la mitad de los pacientes sobre los que se dispone de datos, son de severidad grave.

A la falta de seguimiento de los pacientes crónicos se une también la persistente dificultad de acceso a la Atención Primaria y el retraso diagnóstico. La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica, SEPAR,  ya ha alertado sobre riesgo de una peor atención a la tuberculosis, o sobre los peligros del retraso diagnóstico en enfermedades respiratorias raras como la PFI y la LAM, advirtiendo de que si persiste la situación “los pacientes pueden llegar en fase avanzada de la enfermedad a las consultas neumológicas especializadas y, por tanto, con menos opciones terapéuticas dirigidas a la enfermedad”.

Colapso en los laboratorios de función pulmonar

Asma y epoc, las dos patologías respiratorias de gran prevalencia en España, eran ya antes de la pandemia enfermedades con un elevado infra diagnóstico, de hasta el 80% en el caso de la epoc y del 50% en el de asma. Si la atención sanitaria no recupera al menos su ritmo pre pandemia, afirma el presidente de Fenaer, Mariano Pastor, “las consecuencias pueden ser terribles para los pacientes y para el propio sistema”, y esto a su entender sucederá “si las administraciones no reactivan la Atención Primaria y las consultas especializadas y no se refuerzan los laboratorios de pruebas de función pulmonar, colapsados por los protocolos anti covid-19 y la necesaria atención a los pacientes con covid persistente”.

“Ahora más que nunca” – se afirma desde Fenaer- “se hace imprescindible la implicación en el diagnóstico de la Atención Primaria mediante la generalización de las espirometrías, que permitirían la detección precoz de las patologías respiratorias en un momento, además, en el que la población está especialmente sensibilizada hacia las enfermedades respiratorias por temor a la covid-19”

Reclamación por el retraso de citas y pruebas

Ante la situación, Fenaer pone a disposición de los pacientes respiratorios un modelo de formulario útil para reclamar la reprogramación de las citas anuladas. El documento puede servir para detallar en los servicios de atención al paciente qué pruebas o consultas se han retrasado y suspendido, y solicitar por escrito su programación a la mayor brevedad posible.

Las sucesivas oleadas de la encuesta de Fenaer sobre suspensión de citas y pruebas durante la crisis sanitaria han mostrado un lentísimo ritmo de recuperación. El último sondeo, realizado en marzo, mostraba que el 43% de los pacientes respiratorios no habían logrado reiniciar su contacto con los especialistas de forma presencial, y que una quinta parte no ha podido hablar con su neumólogo desde 2019. Los datos son especialmente preocupantes en el caso de patologías como el asma, con una alta prevalencia entre la población española.

Desde el inicio de la pandemia, Fenaer ha insistido en que citas y pruebas son imprescindibles para evitar un deterioro en la salud de quienes padecen patologías respiratorias. Los pacientes que no consiguen contactar con su especialista no pueden conocer su estado real, ni ajustar sus tratamientos a su situación, ni resolver dudas o inquietudes acerca de la enfermedad que sufren. “Es una situación insostenible que la Administración tiene que corregir con celeridad”, apunta Mariano Pastor, presidente de la Federación, para quien la progresiva superación de la crisis de la covid-19 debería suponer “una rápida resolución de este problema”. “Además de agravar las patologías, no conocer tu situación real ni los pasos que tienes que dar en tu tratamiento supone una angustia añadida para miles de pacientes crónicos que se han pasado casi año y medio voluntariamente confinados por miedo al coronavirus”, resalta Pastor.

Descarga aquí el modelo de formulario de reclamación